Páginas

Hay más días que sandias, más principios que finales y más historias que páginas en blanco. Y aunque te parezca que hay demasiadas páginas sin escribir, están ahi para eso. Para que en ellas escribas tu historia. Como y con quien la compartas es sólo decisión tuya.

Over

Esa mañana me desperté sobresaltada. Con una rara sensación.

Hacia ya días que Layne se había marchado. Había decidido no luchar, no volver, no seguir ahí. No se puede obligar a alguien a que te quiera, a que le importes o tenga el suficiente valor para reconocer algo. Ya no dependía de mi. Aún así me quedaba un sabor amargo de todo esto. Había perdido un amigo, o eso es lo que yo creía, aunque después de todas las mentiras y todas las tramas, podía permitirme plantearme si todo lo que él había dicho que haría por mi como "amigos" sería cierto o solo una más de sus mentiras.

Angel hacía días en los que casi no aparecía por casa, quizás los mismos que hacía que había ido a despedir a Layne al aeropuerto. Supongo que esperaba algo más de mi ahora que él no estaba; pero más que querer que alguien me quisiera o querer a alguien, quería quedarme así. Insensible, sin sensaciones, ni emociones. No quería sentir más. Sentir nos vuelve vulnerables, y yo no quería volver a serlo, no podía permitirme derrumbarme por nadie más, llorar por nadie más. Deseaba que mi corazón se limitara simplemente a bombear sangre y dejará de encariñarse con alguien que finalmente me acabaría mintiendo, como todos los demás.
Si, ya se, estaba generalizando. Pero así habían sido todas mis experiencias hasta ahora. Fue ese el momento donde me prometí a mi misma no volver a entregarme a nadie que no me hiciera temblar el suelo. Porque aunque intente controlar esto, todos sabemos que uno no elige. No podemos evitar que el cariño se extienda como algo que no podemos controlar.
Solo pensaba en ni siquiera darme la oportunidad de sentir, ni bueno , ni malo. Cerrarme herméticamente,inmune a las influencias externas.
¿ Una vida carente de emociones es posible? Siendo sincera, no lo sé. Pero es algo que deseo conseguir con todas mis fuerzas.
Tan cansada de mentiras , hipocresía, problemas y gente que en vez de sangre parece que tiene horchata en las venas.
Sólo quería un poco de tranquilidad y estabilidad en mi vida ¿Era tanto pedir?

Otoño, Mariposas y Huracanes

No es que no me importes, es que ya no me duele.
No es que ya no te extrañe, es que intento no pensar en ello.

Como ya dije alguna vez, todo tiene su tiempo y su espacio. Y dentro de eso, todo tiene su periodo de validez, su limite. Supongo que hasta aquí, que este es el mio.

Ya es hora de cerrar la puerta, marcar el punto, dejar que esta historia continúe; aunque no sea por el sendero que esperaba que discurriera.
Porque al fin y al cabo, la vida es eso, caminos por los que transitamos en diferentes momentos. Elecciones... que nos indican esos caminos.

Y después de tantos "Holding on" que he creado y tratado de mantener, ha llegado la hora de que esta Mariposa le diga "Letting go" a este Huracán de Otoño.

Despedidas amargas

Tenía que dejarlo ir, lo sabía. Pero aún así había algo dentro de mi que no me dejaba alejarme del todo.
Layne había marcado un antes y un después en mi vida. De verdad iba a dejar las cosas así, sin más? Iba a dejar que cogiera ese avión y no volver a saber de él?

Aunque pareciera egoísta,insensato o insensible. SI, iba a hacerlo. Ya no dependía de mi. Él había tomado su decisión y por más que me doliera o no estuviera de acuerdo con ello, no era yo, esta vez no decidía yo.

La puerta de la entrada se abrió lentamente. Oí como Angel tiraba las llaves sobre la mesita del centro del salón. Su forma de dejar las llaves sobre la mesa era muy característica.

- estás despierta? - intentó sonar suave, en un tono muy medido por si no lo estaba.
- si -
Se sentó junto a mi en la cama.
- pensé que no ibas a volver - admití.
Angel solamente suspiró antes de enterrarme entre sus brazos. Que sucedía? Porqué estaba tan raro?
- como no iba a hacerlo...- sonrió con el recuerdo de algo, pero en cierto modo aquella risa me resulto levemente sarcástica-... si no hago más que hacer estupideces por ti -
- perdón? -
- te quiero, y espero que no te enfades cuando sepas que he ido a despedir a Layne al aeropuerto -
- despedir, enfadarme? Que es lo que no me estás contando Angel? -
- le he pedido que te dejara ir... - concluyó con gran esfuerzo - ... que te dejara seguir adelante para poder ser feliz -
- y si soy yo la que no quiero seguir adelante , y si soy yo quien no quiere dejarle ir? -
- hubieras corrido hasta ese aeropuerto, y hubieras parado todos los aviones si hubiese sido necesario -
- No puedo quedarme, pero nunca me marcharé del todo, no con respecto a él -

Morfeo

Había sonrisas, complicidad, química y tiempo. Y si no lo había lo fabricábamos.
No importaba la hora, el día, nada... nada más. Eramos un conjunto de sensaciones que nos envolvían en una burbuja de tranquilidad y comprensión.
Podría decirte que echo de menos esas noches, esas típicas frases y que me riñeras para que me durmiera temprano.
Podría hacerlo, pero ya lo sabes...
Podría querer retroceder en el tiempo, y quiero, pero ya no sirve de nada...

Y ahora que mi insomnio viene y va con distinta frecuencia a cuando tú estabas aquí. Desdibujo recuerdos y maldigo días, tantos como horas de sueño ocupo ahora. Porque sin ti, las horas se han vuelto tan aburridas que Morfeo consigue ganarme la batalla noche tras noche. Y si soy sincera, desearía que Morfeo volviera a abandonarme.
En cierto modo siento como si me traicionara a mi misma. Puedo dormir mejor cuando tú no estás que cuando estabas conmigo??? Quiero pensar que me podían las ganas de estar contigo.
Se me escapaba el tiempo...se me hacían pequeños los días.

Finalmente acabamos en este punto, donde ni te vas del todo , ni te quedas. Donde ni me alejo para siempre, ni soy capaz de continuar aquí.
Siempre hay algo que me trae de vuelta a ti, tarde o temprano, y eso es lo que me mantiene aquí...todavía.

Y si , se que ya nada de esto importa, o al menos a ti no...

Sentir y no querer

Tiempo, distancia, recuerdos y olvido. Y al final, nada de eso sirve, nada , porque solo un simple segundo sirve para desmontar todo el esfuerzo por dejar de sentir.

Tanto tiempo intentando no sentir, creyendo que realmente lo había conseguido. Y te das cuenta de que no ha servido de nada, nada sirve, cuando empiezas a preocuparte porque alguien sea feliz, por la felicidad de alguien. Ese momento, ese preciso momento, donde comprendes que sientes algo por otra persona, algo que no quieres sentir.